Need - The Benjamin Gate

The fear I carry in my heart 
The things that change and turn around me 
What is it that I become? 
What is it that it's all undone? 
I long to be close to You 
So close I disappear into You 
Doesn't matter what I try and do 
You show me what is real and true 
The person that I hope to be 
Not bound by anyone's opinion

A person with history 
Moving to my destiny 
Whatever I'm needing 
Whatever I'm feeling 
I give up to You 
I give up to You 
You hold me tight in Your hand

That's when I feel the peace that I crave 
You make me brave to withstand 
You take me thru this barren land 
God I hear You speak so clear 
Your words melt away my fear 
Even when I'm far - You are near 
Your love will never disappear 
That's when I lose myself in You.

No hay ningún secreto íntimo dentro de mí

Conocer a alguien íntimamente es tan ÍNTIMO (aunque parezca redundante)  e intenso que no puedes describirlo, no puedes contarlo ni compartirlo con nadie. Es algo personal, sublime entre dos seres, NADA MÁS.

Tan íntimo que dejas de conocer, hasta dejas de sentir. Y si se llegara a intentar describirlo, no se encuentran las palabras por dentro ni de uno mismo, ni de ese otro ser; no están en ningún lado. Dos almas que simplemente fueron una en un momento y conspiraron contra el mundo y la existencia divina, humana, mortal e inmortal. 

Dios, te quiero conocer íntimamente para dejar de conocer y saber de ti, y perderme en conocimiento y astucia, perderme en moral y dignidad.  Y que todo eso sea tan íntimo que no pueda contárselo a nadie. Simplemente algo sublime entre vos y yo.

(Aún no lo conozco así porque todo lo que sé de Él se los he contado, no hay nada más guardado en ningún lado. No hay ningún secreto íntimo dentro de mí. ¡Qué triste!)

Sin notarlo

Después del aburrimiento me viene la indiferencia. (Siempre me pasa)

Hoy me pongo a pensar y me doy cuenta que hace muchos días atrás estaba aburrida de la forma en como conozco a Dios.

¿Qué me está pasando? Lo que me apasiona en la vida me es indiferente ahora (en todo sentido).

ME URGE AYUDA    :'(

(Aclaración: aburrida de la forma en como lo conozco, no de Él)

Día 143

Toda autoridad dada en la Tierra es cedida por Dios, por muy simple o rara que parezca de su “espiritualidad”. Nada es otorgado en la Tierra sin su concentimiento.

Día 142

Dios ama al dador alegre. Es su naturaleza el DAR. Creo que nadie duda en esto, todos lo hemos notado y sabemos que Él se deleita en dar.

Si fuimos hechos a su imagen y semejanza y ahora que lo conocemos tenemos un mismo sentir en Él, deberíamos coincidir en este hecho. Dios nos da abundancia para suplir la pobreza de otros y de la misma manera, con sus riquezas suplir nuestras pobrezas.

¿Por qué entonces algunas veces cuando damos, damos con tristeza o por necesidad? Si Dios promete suplirnos en abundancia. He ahí por qué Dios ama al dador alegre. Por que es un acto de fe el que creamos que Él proveerá para más y que comprendemos Su sentir de COMPARTIR POR AMOR.

Día 141

Él promete que nos dará gracia en abundancia, teniendo siempre en todas las cosas lo suficiente y así seamos abundantes para TODA BUENA OBRA. (2 Corintios 9:8)

Día 140

¡Wow!  Él nos ruega que nos reconciliemos con Él. “RUEGA” literalmente. 2 Corintios 5:20 lo demuestra, ¡Qué desesperado está Él por nosotros!

Día 139

Su poder se perfecciona en nuestra debilidad. (Dios me urge que te perfecciones en mí AHORA)

Día 138

Todas Sus promesas son en Él un sí, y en Él un Amén, por medio de nosotros, para Su gloria. (2 Corintios 1:20)

Día 137

Dios nos dejó su palabra para instruirnos, guiarnos, y conocer de Él; para aumentar nuestra fe y conocer de Él. Pero ella no nos hace salvos.

Día 136

Dios en su fidelidad no os dejará ser tentados más allá de lo que podamos resistir, sino que dará juntamente con la tentación la salida, para que podáis resistir.  (1 Corintios 10:13)

Día 135

Él nunca se negará a tener una relación más allá de lo común y corriente contigo; una relación de aquellas que requieren deseo, perseverancia y determinación de parte tuya.

Día 134

Él es celoso con nosotros pues quiere que seamos un solo espíritu con Él. Su deleite está en nosotros, nada más. Somos su obra extraordinaria, somos sus amigos, somos sus hijos.