martes, 9 de junio de 2009

Día 154

"Por el contrario, que sus palabras contribuyan a la necesaria edificación y sean de bendición para quienes escuchan." (Efesios 4:29)

La primera edificación, el primer trabajo que hacemos en instruir en nuestro alrededor, sembrar en las personas que nos oyen. ¿Por qué nos preocuparemos tanto en hacer grandes cosas para "EDIFICAR" a los demás? Si destruimos fe, ánimos, aliento en cada uno de ellos  con lo poco que oyen de nosotros. Con todas nuestras palabras de desánimos, maldiciones, insensatas ocurrencias, faltas de fe y esperanza, semillas que regamos a cada rato dejándolas sembradas en un sinfín de corazones. Creo que tenemos que tener más cuidado con lo que hablamos, tratando de fortalecer y animar.


No hay comentarios: